La diseñadora de moda holandesa Iris van Herpen comenzaría con su propio sello hace apenas siete años, hacia 2007. Pero sería en julio de 2011 que fuese invitada como miembro de la Cámara Sindical de la Alta Costura, algo que se ha ganado por un asombroso talento. Desde los inicios de su carrera se auguraba un futuro muy prometedor y ha sido reconocida y galardonada con premios, publicaciones y numerosas exposiciones, además de prestarse a colaborar con diferentes artistas.
Sus diseños, orientados generalmente al público femenino, muestran su interés por distintas formas de arte, técnicas y texturas, además de su curiosidad general más allá del ámbito de la moda. Asimismo es una gran innovadora en lo que refiere a sus métodos, experimentando con distintos materiales, técnicas y tecnologías como ya apuntábamos.
Sentía necesidad de ir más allá del uso tradicional con la tela suave, pues quería esculpir moda. Así pues, decir que representa una "moda escultórica" no quedaría fuera de lugar, además que parecen haber funcionado como "obras independientes" en diferentes exposiciones. Siente un gusto y necesidad por el movimiento y el cuerpo, de modo que sus prendas deben adaptarse a los mismos y adoptar nuevas formas. Le interesa ver cómo el cuerpo en movimiento reacciona con esa ropa, y viceversa, para entender el comportamiento al uso.