¡Muy buenas!
Hacía ya mucho tiempo que no traía una entrada hablando de Arte, ese tema principal por el que nació este espacio. Como ya sabréis, hay incontables formas de producir arte, algunas más orientadas a la artesanía, otras - bajo mi punto de vista - muy orientadas a la crítica social y bastante alejadas del concepto artístico y, por ello, hoy quiero hablaros de algo diferente.
En este blog ya hemos mencionado algo al respecto de las
ilusiones ópticas en las calles a través de la
anamorfosis, con
Edgar Müeller y
Julian Beever como sus máximos exponentes en la actualidad.
Pero, a decir verdad, estos efectos que juegan con nuestros ojos llevan cola. Si bien éstos artistas mencionados quieren impresionar con la tridimensionalidad dispuesta en el suelo, a principios de los Años 20 surgió una corriente artística que buscaba romper con la condición estática de la pintura y la escultura conocida como "Arte Cinético".
En otras palabras, el Arte Cinético es la presentación de una obra como si de un objeto en movimiento se tratase y, en la mayoría de los casos, no sólo refleja dicho movimiento, sino que se está moviendo en realidad.
Hacia 1910, época de vanguardias, destacamos la
inquietud de los artistas por el susodicho movimiento y sus efectos en el arte. En concreto, el
Movimiento Futurista tuvo en consideración todo lo que giraba en torno a la máquina y la tecnología, y jugó con ello en los trazos que disponían a través de sus pinturas.
Obra de Giacomo Balla (1871 - 1958), 15 Líneas de Movimiento y Sucesión Dinámica, 1913.
Otras obras de
Marcel Duchamp fueron relacionadas con ello, pero no sería hasta 1954 cuando se acuñaría el término
Arte Cinético para designar las obras de arte en movimiento, con o sin mecanismos motorizados. De hecho,
es importante destacar el invento del móvil (especie de escultura realizada con alambre y piezas de metal que quedan suspendidas y se mueven ligeramente gracias al aire en el ambiente). Su inventor fue
Alexander Calder (1898 - 1976), considerado como uno de los mayores ejemplos de este movimiento artístico. De hecho, comenzaría haciendo dibujos móviles jugando con las dimensiones hasta que dio con este tipo de escultura de la que hemos hablado y que tan familiares nos resultan. Algunas, incluso, presentan motores eléctricos que favorecen el movimiento.
Sin embargo, no debemos olvidar que previamente a este
boom artístico existió el
Op Art, una tendencia artística que viene a designar el estilo basado en lo abstracto geométrico y los efectos ópticos, considerando pues a
Victor Vasarely (1906 - 1997) como el
padre original del Arte Cinético. Su obra destacada y que sería realmente su primer
Op Art, se titula "
Zebra" (1938), la cual presenta ya los rasgos fundamentales que posteriormente denominaron este estilo artístico que estamos tratando en este post.
De esta forma,
los artistas que han querido experimentar con el movimiento se han basado en la abstracción precisamente para generar en el espectador un efecto o ilusión óptica, que quedan expresados a través del movimiento. Es válido tanto en pintura, como en escultura.
Estas corrientes o tendencias artísticas contemporáneas tienen ese objetivo y estudian la estética del movimiento, como decíamos. El término, como tal, parece que fue acuñado por
Naum Gabo en su
Manifiesto Realista, pues rechazaba los ritmos estáticos dados en la creación plástica, los cuales debían ser reemplazados por los "
ritmos cinéticos":
formas esenciales de nuestra percepción del tiempo real. Esta tendencia estuvo muy de moda entre los años 60 y 70 y estoy convencida de que todos habremos visto algo relacionado alguna vez, al menos.
Sus características principales, como decíamos, se basan en esa búsqueda constante de movimiento (aunque en su mayoría es real, justamente por el uso de motores como citábamos anteriormente). Todo queda perfectamente planificado, ya que juegan con la tridimensionalidad al rechazar casi en rotundo el plano bidimensional. Es todo lo opuesto al arte figurativo aunque, como casi todas las tendencias artísticas, busca crear un efecto en el espectador. En este caso, una estimulación de la vista por medio de las ilusiones ópticas, a la vez que pretende crear una integración completa entre la obra y éste.
Los recursos empleados para crear el movimiento pueden ser realmente infinitos: juegan con la luz, el color y la sombra, y pueden hacer uso del agua, el viento y motores, entre otras cosas, favorecidos con formas simples y repetidas.
Para acabar, os dejo con algunas obras más de este tipo de arte tan curioso y llamativo.
Espero que os haya gustado.
¿Qué opináis sobre este tipo de corriente artística?
¡Contadme, os leo!
No soy muy fan del arte ni mucho menos entiendo de ello xD pero este tipo de arte que creo estas ilusiones ópticas me encantan ^^
ResponderEliminarMe alegra que, pese a todo, te haya gustado.
EliminarNo soy muy entendida en arte pero con estas imagenes me quedo muchas veces embobada mirando intentando ver mas alla.
ResponderEliminarSaludos
Eso es justamente lo que pretenden, embobarnos xD
EliminarNo hace falta entender de algo para poder disfrutarlo.
Saludos.
Este tipo de arte lo di el año pasado así de pasada, su intención es la de conectar con el espectador y producirle algo, una interacción sobretodo visual. También hay un tipo de cine de estas caracteristicas, un cine considerado de vanguardia, si te interesa lo buscaré porque es muy curioso y muy extraño sobretodo.
ResponderEliminarExacto, eso es justamente y me resulta muy interesante.
EliminarHooola Paola!!
ResponderEliminarNo sabes como me alegra que hayas dedicado una entrada al arte cinético, porqué es toda una ciencia en si. Es maravilloso -hay veces incluso que marea- pero no deja de ser un arte de una complejidad tremenda en la que se pretende engañar al cerebro -haciendo que el ojo capte los cruces de imágenes como le da la gana y lo transmita a las neuronas como algo que no es-.
Me acuerdo vagamente de Calder e incluso creo que vi una obra suya hace un montón en una expo sobre Duchamp. Pero sabes las que me encantan? Hay un señor que construye esculturas (de madera o bambú, creo) que andan solas mediante energía cinética. Espera que lo busco, que no me acuerdo del nombre. Vale, Theo Jansen, se llama el artista y perece que estén vivas. Es una maravilla, cuando las veo parecen casi mágicas. Me encantan tus entradas sobre arte!!!
Un besote enoooorme!! ♥
Me alegra que te haya alegrado dicha entrada. Es muy interesante, sin lugar a dudas. Sí, conozco algunas de las obras de Jansen y son una auténtica pasada.
EliminarMe alegra que te gusten, Hydre! Un besazo.
Me encanta cómo las cosas pueden cambiar tanto dependiendo de cómo las veas o dónde fijes la mirada, igual te da un chungo pero es increíble
ResponderEliminarTotalmente de acuerdo.
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