Muerte sin Resurrección

Título: Muerte sin resurrección.
Autor: Roberto Martínez Guzmán.
Primera Edición.
Año: 2012.
Páginas: 253.
Autoeditado.

* Sinopsis:

Domingo de Ramos. 

En el corazón de Vigo, a la una del mediodía, numerosas personas se dan cita en el interior de la Iglesia de Santa María para celebrar el inicio de la Semana Santa.

El aroma a laurel, olivo e incienso lo inunda todo, el calor es insoportable y desde el altar, el párroco se afana en explicar el significado de la pasión y muerte de Cristo dificultado por la enorme multitud que en esos momentos se concentra dentro del templo.

En un lateral, en la estricta intimidad de un confesionario, una enigmática mujer de rasgos casi perfectos explica con serenidad a un joven sacerdote la motivación que ha guiado su vida durante los últimos seis años, pero también un más que inquietante futuro próximo. 

Tras una sinopsis prometedora, os pongo en situación rememorativa:

Este es el libro que gané en un sorteo que organizó el mismo autor, en esa racha de buena suerte que parece haber acabado ya. No obstante, lo que gané me hizo muy feliz y, en el caso que nos ocupa, estoy doblemente agradecida. En primer lugar, por el premio en cuestión. Y, en segundo lugar, porque el libro me ha encantado. 

Roberto Martínez Guzmán, nacido en Ourense en 1969, ha hecho honor a su tierra ambientando la novela entre Vigo y Ourense, lugares donde se van sucediendo los acontecimientos y conoceremos a los personajes. Ahora se encuentra inmerso en una nueva obra, por lo que desde aquí mando muchos ánimos y éxito a sus futuros trabajos. 

* Opinión personal:

He leído el libro en apenas dos días. Realmente me llegó bastante antes, pero estaba leyendo El temor de un Hombre Sabio y no me gusta dejar libros a medias porque, conociéndome, luego los abandono, literalmente. Hoy no pude esperar a la noche y decidí acabarlo. ¿Resultado? Cuasi perfecto. 

Es una novela policíaca, corta y adictiva desde el principio, narrada en tercera persona de forma omnisciente (hecho que facilita que conozcamos los pensamientos de sus personajes) que sigue un orden cronológico muy marcado: comenzando un Domingo de Ramos, abarca toda la Semana Santa hasta el Domingo de Resurrección. 

Algo que es todo un acierto, desde mi punto de vista, para que al final de la misma, se haga como una especie de retorno al principio, de modo que todo encaja y te quita el hipo. 

Tenemos a dos protagonistas femeninas: Emma, una mujer que se encarga de cometer una serie de crímenes perfectos y con un sello tan característico como una sencilla pelota de golf y, por contra, Eva, una Inspectora de policía que será la encargada de la investigación de los asesinatos y de descubrir cuáles han sido los motivos que llevaron a Emma a cometer tales atrocidades.

Nosotros sabemos desde el primer momento cuáles son sus pretensiones y vamos viendo cómo se van sucediendo los acontecimientos. Pero tardaremos en comprender el por qué, al mismo tiempo que Eva va indagando en el tema, haciéndonos comprender que los buenos no son tan buenos, ni los malos, tan malos. Capítulos que intercalan los diversos sucesos, desde los propios asesinatos, las vidas de los personajes y la investigación policial. 

Por suerte, no llegaríamos a empatizar con ninguna de las víctimas ya que todas, desde el principio, el autor se ha encargado de hacérnoslas insoportables. 

El personaje de Eva es muy interesante, una mujer inteligente y luchadora. Envidiable en su labor, ya que hay momentos en los que no sabes cómo ha sido capaz de llegar a según qué conclusiones. Eso sí, me habría encantado conocer mucho mejor a Emma, por mera curiosidad, ya que desde que descubres cuáles son los motivos, eres capaz de justificar sus actos.

En definitiva, creo que ha sabido llevar la novela con inteligencia, intercalando la narración con interesantes diálogos y, aunque los primeros capítulos se me hicieron algo previsibles, consigue engancharte sobremanera, con toques de suspense, que te llevan hacia un final inesperado e inmejorable. Confieso haber llorado como una idiota, siendo un final que ha reforzado mi admiración hacia Emma, por más asesina que sea. 

Gracias a Roberto por esta obra, la cual espero que tenga mucho éxito y os recomiendo encarecidamente. Podéis encontrarla en Amazon. 

Y, para terminar, os dejo con la encantadora dedicatoria que acompañaba su novela: 

Hasta aquí la reseña. Espero que os haya gustado y, ya sabéis, si os pica la curiosidad, no dudéis en darle una oportunidad. 

¡Hasta pronto!