Ante todo, mucho karma

Título: Ante todo, mucho karma.

Autora: Laura Norton.

Editorial: Espasa.

Género: Romántica / Chick-lit.

Fecha: 2017.

Número de páginas: 398.

Precio: 19,90 €.

* Sinopsis:

El principio de esta novela se parece a un final feliz. El buen karma reina: tras muchas tribulaciones, Sara está con Aarón, su Aarón, por fin empieza a tener el reconocimiento en el trabajo por el que tanto ha luchado y la guinda será cuando descubra que ¡están embarazados!

Sin embargo, ser madre es mucho más difícil de lo que Sara imaginaba. Se siente sobrepasada, perdida y torpe. Su autoestima, como mujer, madre, profesional, amante y persona humana alcanza una cota, de puro baja, subterránea.

Y ahí es cuando el universo parece confabularse contra ella y Sara la lía parda y arrastra a todos a su paso: a sus padres, a su hermana, a Roberto y por supuesto a Aarón. Ella es así. ¿Lo suyo tendrá remedio?

* Opinión personal:

Sin duda sigue la línea de su antecesor, No culpes al karma de lo que te pasa por gilipollas, con la reconocible prosa de su autora, ágil y relativamente amena. Y es que, aunque la historia en sí pueda parecer entretenida, la maldita Sara es insufrible. Pocos personajes me han cargado tanto como ella. 

No obstante, debo reconocer en este caso que no he hecho tantos parones en la lectura como en la novela anterior (¿o será que ha sido por ser un envío editorial?). No puedo decir que sea una gran historia, porque no sólo es exagerada, sino que desespera a partes iguales. Cuando digo que sigue en la línea es por ser hasta suave para con él, porque lo caótico del argumento en la primera novela, aquí ya es el despiporre. Sin embargo, reconozco que me ha picado más la trama aunque hubiese tenido ganas de estrangular a la protagonista. 

Supongo que, aún no estando de acuerdo con cómo funciona la mente extraña de Sara, me ha parecido interesante el punto de vista que la autora otorga a la maternidad, donde no todo es maravilloso. A su vez y esto tiene mucho que ver con el desenlace final de la historia, reconozco que me gustó lo que estaba pasando en la profesión de la misma y cómo consigue resolverse, aún de forma previsible y estrambótica, todo el asunto que deja a Sara en tan mal lugar profesionalmente hablando. 

Las relaciones interpersonales que se tratan en esta obra, aún con esos vaivenes emocionales y tanta locura surrealista, resultan simpáticas a la par que agotadoras; así como también enfoca una visión muy natural sobre la sexualidad referente al poliamor y otras variantes. 

Volvemos a hacer mención a los personajes más secundarios, aunque Sara sea la clara protagonista y yo no haya conseguido empatizar con ella casi en ningún momento (digamos que el final la salva un poquito...). Aarón está pintado como el tío perfecto, correctísimo y sin fallos que tampoco me creo. Se podría decir que la que más me gusta, aún con sus locuras, es Lu, la hermana de Sara y su madre majareta (del todo). 

En resumidas cuentas, Ante todo, mucho karma es una novela que sigue en la línea de su primera parte, con una historia aún más enrevesada que lleva a los personajes al extremo de la locura, con situaciones surrealistas que pretenden, en su mayor parte, ser divertidas. Fresca y de prosa muy amena, eso sí, muy rápida de leer al no ser demasiado extensa. El tipo de romanticismo dramático que se trata es el que le gusta a la gran mayoría del público femenino más juvenil, generalmente y creo que es especialmente recomendable en estos casos. Por mi parte, sigo quedándome con Gente que viene y bah. 

Gracias a la Editorial Espasa por el envío del ejemplar.

Y vosotros, ¿ya lo habéis leído?

¿Qué opináis sobre este tipo de historias?

¡Contadme, os leo!