¡Hola, hola, mis queridos raptados!
Siento llevar tanto tiempo desaparecida. Creo que lo comprenderéis más que de sobra: ¡estamos de vacaciones! Y me ha sido imposible coger el ordenador hasta hoy, aunque parezca mentira.
No obstante, no podía dejar pasar esta ocasión y pasarme, el último día del año, a dejaros mis mejores deseos para todos en este nuevo año que comienza. Hoy, 31 de diciembre de 2014, vuelvo a compartir con vosotros un post-reflexivo que, realmente, es sólo la excusa para lo típico.
Quiero daros las GRACIAS, enormes y de forma cansina, a todos y cada uno de los lectores de este espacio. Gracias a vosotros, esto sigue creciendo, seguimos aprendiendo y divirtiéndonos juntos. Bienvenidos los nuevos seguidores, claro está... ¡¡Hemos alcanzado los 302!!
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Es por ello que, aunque no nos veamos las caras, nos vamos conociendo con el paso del tiempo y no puedo dejar pasar la ocasión para brindar con vosotros desde la blogosfera.
Espero y deseo que seáis requetefelices, que despidáis un gran año rodeados de todas aquellas personas con las que os apetezca compartirlo y que, por supuesto, recibáis el nuevo año con una gran sonrisa, como mínimo.