Trilogía Millennium: Stieg Larsson

¡Muy buenas, amigos! 

Hace algún tiempo que leí los dos primeros libros de Stieg Larsson, ni si quiera tenía blog por aquellos entonces. Sin embargo, circunstancias de la vida (básicamente los estudios, exámenes y el consiguiente abandono de lecturas densas) hicieron que el tercer y último libro de la saga fuese posponiéndose en el tiempo. Por fin lo retomé y terminé la semana pasada y, al no haber reseñado los anteriores aquí, pensé en hacer mini-reseñas de los tres en este post. De este modo puede resultaros más ameno y quizá, de no conocerlos, poder llamaros la atención.

Se trata de una trilogía creada por el ya fallecido escritor sueco Stieg Larsson, concebidas como novelas criminales de rotundo éxito a nivel internacional. Tres libros enrevesados publicados de forma póstuma que venían a conformar un universo bastante más complejo ideado por el autor pero que, por su repentina muerte, sólo estos fueron completos: Los hombres que no amaban a las mujeres o La chica del dragón tatuado en la espalda (2005); La chica que soñaba con una cerilla y un bidón de gasolina o La chica que jugó con fuego (2006) y La reina en el palacio de las corrientes de aire o La chica que pateó el nido de avispas (2007).

Este pasado año se publicaría un cuarto libro escrito por David Lagercrantz: Lo que no te mata te hace más fuerte o La chica en la telaraña (2015), pero no está basado en ninguno de los borradores inconclusos de Larsson, de ahí que no tenga ningún interés en leerlo. 

Dicho esto, tendréis opiniones al respecto de los libros a continuación.

Millennium 1. 

Los hombres que no amaban a las mujeres.

Este sería uno de mis libros favoritos de la saga y, además, de todos cuantos haya leído a lo largo de mi vida. En él conoceremos poco a poco a los dos protagonistas principales: el implicado y polémico periodista Mikael Blomkvist y la introvertida pero extraordinaria hacker informática Lisbeth Salander. 

La trama del mismo expone un caso de investigación tras un extraño sucedo de desaparición de la joven Harriet Vanger 36 años atrás, donde un anciano magnate - Henrik Vanger - contrata al periodista para que indague en ello. Lo que podría parecer tan simple como eso, comienza a complicarse al tirar de distintos hilos que comprometen a la familia Vanger y, por cuestiones de la vida, Lisbeth Salander se implica en ello de forma inesperada para Blomkvist. 

Es un libro realmente interesante que expone una enrevesada e interesantísima historia policíaca que incluye aspectos periodísticos, psicológicos y de corrupción que difícilmente encontraremos en otras historias. Queda absolutamente concluso, pese a lo que iremos descubriendo sobre la vida de Salander. Mucho más que recomendado. 

Millennium 2. 

La chica que soñaba con una cerilla y un bidón de gasolina.

Siguiendo con la segunda parte del libro, encontramos una trama aún más enrevesada si cabe donde los casos de corrupción llegan a las altas esferas del Gobierno sueco. Partiendo de un revelador artículo sobre un caso de tráfico sexual de mujeres de Europa del Este en Suecia, en la revista Millennium en la que trabaja Blomkvist se muestran interesados en desenmascarar a todos los implicados que, al parecer, llegan a estar muy relacionados con altos mandatarios. Un doble asesinato hace que las miradas se fijen en Lisbeth Salander como culpable. 

Mikael intenta seguir investigando para probar la inocencia de su amiga y, tirando de los hilos, acaba por descubrir un interesante vínculo que comienza a tomar forma en esta historia y que seguirá en la novela posterior. 

Es absolutamente admirable como el escritor  ha ido desarrollando una historia tan compleja, con tantos flancos abiertos, que nos mantendrán en vilo durante su lectura. Aunque los libros son densos y bastante largos, las descripciones no resultan pesadas y, pese a poder parecer lioso por la complejidad del argumento, está perfectamente explicado. En este segundo libro descubrimos cosas muy interesantes sobre el pasado de Lisbeth Salander y el por qué de muchos problemas que ha tenido, hasta el punto de tener en peligro su propia existencia. 

Millennium 3.

La reina en el palacio de las corrientes de aire.

Tras descubrir la existencia de una entidad secreta en el Servicio de Seguridad Sueca, se llega a la conclusión de que Lisbeth Salander ha sido una víctima del sistema en el cual se han cometido diferentes violaciones constitucionales contra su persona. 

Blomkvist se ve inmerso en un círculo de investigación policial que pertenecen a la División de Protección Constitucional, en busca a desenmascarar a todos esos implicados que no sólo han cometido barbaridades en el propio Estado, sino contra una persona que parece ser un auténtico efecto colateral y a la que acusan con cargos de asesinato. 

Tras su lectura, estalla la cabeza. Se vuelve mucho más que interesante y todas las piezas del puzzle acaban encajando sistemáticamente, dejándonos con la boca abierta. La investigación tanto por parte de los periodistas, como por la policía, incluyendo las técnicas poco ortodoxas de Lisbeth y sus contactos, harán que disfrutemos de forma exagerada de una historia absolutamente perfecta, sin fisuras. Que acabe es una auténtica pena porque, tras conocerlos, ¿quién no querría saber más de Salander?. Diría que es de lectura obligatoria, incluso...

En definitiva, la Trilogía Millennium es una saga extraordinaria en la que encontraremos una telaraña que, pareciendo una auténtica maraña confusa, expone una historia interesantísima en la que se tratan temas policiales, periodísticos y políticos que tienen que ver con los abusos de poder que suelen ser masculinos; por lo que además es una defensa de los derechos de las mujeres, poniendo en valor su trabajo y posición. Recomendadísima. 

Y hasta aquí estas mini-reseñas que, espero, no os hayan parecido demasiado excesivas. Creo que se nota que he adorado estos libros y espero que me dejéis vuestras percepciones en los comentarios.

Pronto os traeré las reseñas de las películas suecas.

¿Vosotros los habéis leído?

¿Cuál de los tres es vuestro favorito?

¿Qué opináis sobre el cuarto libro? ¿Lo recomendaríais?

¡Contadme, os leo!