Maurizio Savini: Escultura de Chicle

Sí, sí. Dejad de restregaros los ojos porque habéis leído bien: 

¡Esculturas hechas con chicles!

Se me ocurrió probar a buscar, por si encontraba algo, tras aquellas fabulosas obras hechas con palillos de dientes.

Y efectivamente lo encontré. El artista que ha dado forma a ese producto que mascamos por mero placer, es el italiano Maurizio Savini. 

Nacido en Roma en 1962, Savini es un hombre dedicado al campo de la escultura y, aunque parezca curioso, dedicado exclusivamente al uso del chicle como material artístico. Lleva dedicándose a ello más de diez años, con un minucioso trabajo en el que emplea pequeñas piezas de chicle rosa y, en ocasiones, blanco. 

Parece ser que conlleva unas connotaciones simbólicas y culturales interesantes y la elección del color es básicamente para reforzar la idea de lo artificial.

Aunque se puede intuir que los chicles que ha usado no han sido masticados, es una pregunta que se le suele hacer de forma bastante recurrente y, al parecer, no sólo no lo hace sino que además detesta mascar chicle. 

Y yo me pregunto, ¿cómo se le ocurriría la idea de utilizar chicles para hacer esculturas?

Siempre utiliza la misma marca y, curiosamente, los compra y debe desenvolverlos uno a uno ya que la marca se negó a proporcionarle la masa en bruto. 

Su imaginación parece ilimitada y a través de aplicar calor a la goma y cortarla a su gusto con un cuchillo, es capaz de realizar fantásticas obras de arte que nos dejarán a todos con las patillas colgando. Según sus propias palabras, es el material más versátil que existe. Y después de ver esto, me lo creo. ¡Dan ganas de amasar chicle!

No obstante, una vez finalizadas sus esculturas debe fijarlas con ciertos antibióticos y formaldehído ya que el azúcar, en poco tiempo, llegaría a destruir las obras.

Según he leído en diferentes páginas, algunas esculturas han sido compuestas por más de tres mil chicles (¡menuda tarea!) y han llegado a alcanzar precios tan desorbitados como los 50.000 €. 

Una vez más se puede demostrar que el Arte tiene numerosas acepciones y todo dependerá de quién hace algo y cómo lo hace. Desde luego, no falta originalidad, ni sentido artístico si quiera. Nadie puede negar que Savini es un magnífico escultor, que ha dominado una técnica jamás usada con anterioridad y, a más inri, ni si quiera pensada para tal fin. 

Por supuesto, tal y como cabe esperar, además de haber expuesto sus obras en su ciudad natal, han viajado por lugares como Atenas, Londres, Lisboa, Mónaco e incluso Tokio. ¡Ojalá llegara por España!

 

¿No os dan ganas de pegarles algún que otro bocao?

"La carnosidad sintética del color rosa, la obsesiva forma cuadrada del producto desenvuelto y listo para ser hecho pedazos por el poder de la lengua, todo compite por impactar los sentidos. Aplicando todo esto al poder y energía de la Escultura y su historia, causa un cortocircuito, al tener la capacidad de convertir lo lúdico en imponente".

Aunque podéis encontrar mucho más curioseando por internet, os voy a dejar con un vídeo que he encontrado la mar de interesante, donde se explica con más detalle todo lo anteriormente comentado.

¡Espero que os haya gustado! ¿Qué os ha parecido? ¿Se os ocurre de qué otra manera podrían realizarse obras de arte? ¡Estad atentos, que pronto caerán más entradas con comida hecha arte!

Nos leemos, hasta pronto.