El Libro de la Selva

Título original: The Jungle Book.

Año: 2016.

Duración: 105 min.

País: 

Director: Jon Favreau.

Guión: Justin Marks.

Adaptación de la novela homónima de Rudyard Kipling.

Remake del clásico homónimo de Walt Disney (1967).

Música: John Debney.

Fotografía: Bill Pope.

Género: Aventuras / Fantasía / Remake.

Productora: Walt Disney Pictures / Fairview Entertainment / MPC.

Reparto: Neel Sethi, Bill Murray, Ben Kingsley, Idris Elba, Lupita Nyong'o,

 Scarlett Johansson, Giancarlo Esposito, Christopher Walken, Garry Shandling.

* Tráiler:

* Sinopsis:

Mowgli, un niño criado en la selva por una manada de lobos, emprende un fascinante viaje de autodescubrimiento cuando se ve obligado a abandonar el único hogar que ha conocido en toda su vida. 

* Opinión personal:

Ansiaba ver esta película desde que supe que se habían embarcado en este proyecto. Se estrenó el día de mi cumpleaños, pero había que posponerla. Este fin de semana pasado por fin fui al cine y debo decir que salí maravillada. Es más, no sólo me transportó enérgicamente a mi infancia sino que me llenó de inmensa felicidad porque era justo lo que esperaba. Desde pequeñita, mi fijación con Disney llegó a límites insospechados. Siempre quise que llevasen las obras de animación, tal cual, al cine con actores reales y, para mi suerte, desde hace un tiempo para acá se está cumpliendo.

Entrando en materia, El libro de la Selva es una película espectacular en el sentido más estricto de la palabra. Visualmente es absorbente y, sobre todo, muy hermosa. La jungla digital en la que nos adentramos desde los primeros segundos es todo un prodigio técnico, eficaz y realista que imprime alma a todos los seres parlantes que habitan en ella.

Aunque es sabido que se basa en la novela de Kipling, la cual no he tenido el gusto de leer, puedo decir que no sólo es respetuosa con la obra de animación de Walt Disney de 1967, sino que resulta tremendamente fiel. Estás viéndola y tu mente es capaz de flashearte imágenes de la misma, al instante, lo cual te deja con la boca desencajada.

El argumento es prácticamente el mismo, tratado con crudeza y dramatismo emotivo, en el que Mowgli (Neel Sethi) se ve amenazado por ser un cachorro humano y es instado a huir de las garras y temibles fauces de Shere Khan (Idris Elba). Tanto su manada como Bagheera (Ben Kingsley) la pantera negra que lo encontró, consideran que lo mejor es que se vaya con los humanos, el lugar al que pertenece, siendo éste último quien le acompañe en su viaje.

Sin embargo, desafortunados encuentros con el amenazante y peligroso tigre, Mowgli se ve inmerso en una aventura absoluta en la que se conocerá a sí mismo, pondrá a prueba sus aptitudes de supervivencia y conocerá diversos personajes que propiciarán las mejores escenas de la película: como el adorable oso Baloo (Bill Murray), la hechizante Kaa (Scarlett Johansson) o el ambicioso Rey Louie (Christopher Walken).

Por supuesto, tal y como decíamos con anterioridad, este live action contiene animales que hablan tal y como ocurre en la película de animación. Según mi humilde opinión, queda tan realista que ya nos gustaría a muchos de nosotros que así fuera. Están magníficamente realizados y sus intérpretes han sabido otorgarles alma, además de la apariencia física tratada digitalmente. Y, sí, si estábais preguntándoos esto... ¡cantan!. De hecho, ha sido un aspecto absolutamente adorable porque se ha respetado el guión de una forma encantadora.

"Lo más vital en esta vida lo tendrás... "

"A mí no me engañas Mowgli, un trato hicimos yo y tú..."

Debéis permitirme que señale un único aspecto que me resultó extraño en el filme y es que, este Gigantopithecus encarnando al Rey Louie (que ya de por sí me chocó verlo tan enorme, porque adoro al alocado orangután), cuando interpretó la canción me sacó de la película por completo. Tan grande e imponente hace que resulte chocante escucharlo cantar la tan alegre "Yo quiero ser hombre como tú"...

Por lo demás y en resumidas cuentas, no cabe otra que decir que El libro de la Selva es una delicia visual cautivadora, tierna y divertida a partes iguales. Una película encantadora capaz de reunir a los viejos y nuevos fans de la factoría de Disney; llena de vida y mensajes positivos, con peso emocional efectivo, consigue que cualquier tipo de público quede satisfecho. Absolutamente recomendable.

Para aquellos que ya la habéis visto, os dejo este fantástico vídeo en el que hay una comparativa extraordinaria entre ambos filmes que dejan con la boca abierta (por si se nos escaparon detalles durante el visionado de la película).

¿Qué opináis al respecto?

¿Os gusta que lleven a la vida real este tipo de obras?

¿Cuáles querríais ver en la gran pantalla?

En este post comenté algunas adaptaciones futuras muy posibles (y más que no se han comentado).

¡Contadme, os leo!