Vestuario: Titanic

¡Muy buenas!

Hace muchísimo que comencé con la idea de hablar de vestuario de series y películas que me habían entusiasmado. De hecho, hablamos sobre Sira Quiroga y Rosalinda Fox en El tiempo entre costuras, por ejemplo, o Regina de Érase una vez. En ocasiones sueltas he hecho referencia a estos puntos de interés, sobre todo porque siempre me ha gustado mucho el mundo de la moda y tengo una clara tendencia a que me apasione cómo se ve la llamada "vestuario de Época" (que fácilmente puede abarcar desde el Siglo XVI aproximadamente hasta los años 60; y sí, me quedo tan ancha). 

La cuestión es que por esos entonces estaba la idea de hablar de uno de los grandes clásicos del cine, una de esas películas en las que te deleitas - entre otras cosas - con el vestuario elegido y estoy segura de que muchos coincidiríamos en ello. Se trata de la mítica Titanic, de James Cameron. 

En esta galardonada cinta trabajó como diseñadora de vestuario Deborah Lynn Scott (quien también ha participado en reputadas películas como ET, Regreso al futuro, Avatar, entre otras). Y no es de extrañar que, de entre los 11 Premios Oscar que se llevó, uno fuera para el Mejor Diseño de Vestuario. El arduo trabajo que realizó Deborah para esta película contó, además, con la dificultad de mostrar una indumentaria que se viese bien tanto seca como mojada (especialmente en lo referente al personaje de Kate Winslet).

Pasando por un proceso creativo bastante arduo, que implicó tiempo de estudio de una época donde debían incluir una clase alta adinerada y dada a los excesos (pues en la vestimenta reflejaban el estatus y la cantidad de dinero que poseían) y una clase obrera/baja que, además, venía de diferentes partes del mundo (por lo que también debía mostrarse el estilo según las distintas nacionalidades). Por ello, tanto el director de la obra como la diseñadora concluyeron que debían ser lo más fidedignos posible a un periodo que querían mostrar, hablando así de un vestuario hiperrealista que reflejara con claridad un entorno y una época concreta, ya que el suceso fue un hito histórico en 1912. 

Se cuidaron todos los detalles en un proceso que llevó  más de un año, entre viajes en búsqueda de prendas concretas y antiguos complementos que recrearan dicha época. Tanto es así que hasta los actores se metieron aún más en los cuerpos de sus personajes, sobre todo las mujeres, al verse sometidas al corsé (por poner un claro ejemplo). 

De hecho, en el caso de Rose DeWit (Kate Winslet), ni si quiera quiso usar neoprenos bajo sus prendas, para así realizar las escenas con mucho más realismo (lo que provocó finalmente una neumonía considerable). Es más, llegaron a hacerse hasta 24 réplicas exactas del vestido de gasa mítico que lleva la actriz el día del hundimiento, por si llegaba a dañarse tras pasar tanto tiempo en remojo. 

No sé si os pasará lo mismo, pero a mí me fascina enormemente ver las indumentarias tan llamativas de esa película. Tanto es así que estaba hace unos días curioseando Disney+, vi que estaba y me la vi, que además hacía muchísimos años desde que la viera por última vez (y he de decir que no sólo no ha envejecido mal, sino que me fascina igual o más que el primer día). 

Dicho lo cual, os dejo con imágenes sobre la amplia variedad de vestuario que pudo lucir la actriz protagonista especialmente, además de otros tantos miembros del reparto. ¡Espero que lo disfrtuéis!

Referencias:

* Obsidiana.

¿Qué os ha parecido?

¿Os pasa lo mismo que a mí con este tipo de cosas?

¡Contadme, os leo!